Conéctate con nosotros

Noticias

Arraigo, la otra cara de la migración

Nuevo estudio en Latinoamérica revela por qué millones se quedan en sus países a pesar de las crisis

Loading

Comparte la nota

Publicado

en

Arraigo, la otra cara de la migración

Mientras el debate global sobre migración suele centrarse en quienes cruzan fronteras, un nuevo estudio liderado por Ayuda en Acción da visibilidad a otro fenómeno: la inmovilidad, es decir, la decisión —o imposición— de permanecer en el país de origen, aun en condiciones adversas.

El informe, elaborado junto con el Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo (CIID) de Canadá y la Cátedra de Investigación sobre Desplazamiento Forzado del CIID de la Universidad del Pacífico (Perú), analiza esta realidad en cinco países: México, Colombia, Ecuador, Etiopía y Malí. A pesar de la percepción generalizada de un mundo en movimiento, el estudio señala que solo el 3.6% de la población mundial es migrante, lo que revela que la mayoría permanece en su lugar, muchas veces sin que esa decisión reciba atención de las políticas públicas.

“La inmovilidad no es falta de ambición. Es, en muchos casos, una elección forzada por factores económicos, sociales, legales o familiares”, explica Ivanna Herrán, experta en migración de Ayuda en Acción.

Inmovilidad: una elección condicionada

Entre los principales hallazgos:

  • En cada zona analizada, más del 40% expresó deseo de migrar, pero permanecen por múltiples motivos: falta de recursos, miedo, responsabilidades familiares o procesos migratorios fallidos.
  • En países como México y Ecuador, la falta de garantías legales y trámites complejos frenan a quienes quisieran migrar o regularizarse.
  • En Colombia y México, hay un creciente rechazo o cansancio hacia la migración, tras experiencias fallidas o falta de confianza en el sistema.
  • En muchos casos, son mujeres y adultos mayores quienes deciden quedarse para sostener a sus familias.

Propuesta de políticas públicas

Ayuda en Acción plantea cinco estrategias clave para que los gobiernos y organismos internacionales fortalezcan el derecho a permanecer:

  1. Diseñar para familias, no solo individuos.
  2. Reconocer la inmovilidad femenina y brindar apoyos específicos.
  3. Reintegrar a migrantes retornados tras procesos fallidos.
  4. Legalizar y proteger a migrantes atrapados en el tránsito.
  5. Invertir en quienes deciden quedarse para estabilizar sus comunidades.

Este estudio es un llamado a cambiar la narrativa: quedarse también es resistir, y debe reconocerse como una decisión legítima, no como un fracaso. Dar visibilidad y apoyo a quienes optan —o se ven forzados— a permanecer es esencial para construir una política migratoria más humana, justa y efectiva.

Loading

Comparte la nota
Continua leyendo
DA CLICK PARA COMENTAR

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.