Conéctate con nosotros

FINANZAS

Ratifica calificación deuda soberana en HR BBB+ cambiando perspectiva a estable

Publicado

en

Ratifica calificación deuda soberana en HR BBB+ cambiando perspectiva a estable

Los analistas de la calificadora HR Ratings, ratificaron la calificación de largo plazo de HR BBB+, cambiando su perspectiva de Negativa a Estable, y la de corto plazo de HR3, para la Deuda Soberana de los Estados Unidos Mexicanos

Los especialistas señalan que la ratificación y el cambio en la perspectiva de la calificación soberana de México es resultado de la mejora en las principales métricas fiscales que evalúan, ya que se mostró una tendencia cercana a lo incorporado en la acción de calificación de abril 2024.

Prevén que la Deuda a Producto Interno Bruto (PIB), medida en términos del Saldo Histórico, finalizará 2025 en 52.2 por ciento (52.3 por ciento en abril), por debajo de lo proyectado en su comunicado de noviembre (54.0 por ciento), cuando asignaron la perspectiva Negativa, señalando que el Saldo Histórico (SH) cerró 2024 en 51.3 por ciento, por debajo de su expectativa de noviembre de 52.2 por ciento.

Consideran que los esfuerzos de consolidación fiscal por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) han contribuido a la mejora proyectada de los principales balances fiscales hacia el cierre de 2024 respecto al comunicado de noviembre, sobresaliendo los ajustes en el gasto corriente y de inversión, acompañado de una dinámica positiva en los ingresos tributarios.

Como resultado de lo anterior, el déficit presupuestario (o Balance Financiero) para 2025 estimado por HR Ratings es de 3.7 por ciento del PIB, muy por debajo del 4.9 por ciento observado en 2024.

Opinan que el déficit medido por los Requerimientos Financieros del Sector Público (RFSP) bajaría a 4.3 por ciento al cierre de 2025 vs. 5.7 por ciento en 2024. En el mediano y largo plazo, visualizan que esta tendencia a menores déficits continuará, aunque no lo suficiente para contener el incremento en la relación SH/PIB, por lo que se situará por encima de los niveles proyectados por Hacienda en los Criterios Generales de Política Económica (CGPE26), como resultado de las presiones en el costo financiero, el balance del Gobierno Federal y el nivel del tipo de cambio.

Estiman depreciaciones del tipo de cambio en el largo plazo que elevarían en pesos la deuda denominada en moneda extranjera, lo que contrasta con las expectativas de Hacienda de la revaluación del tipo de cambio en 2026 y 2027, y estabilidad a partir de 2028.

Sus proyecciones indican que la métrica SH/PIB superaría en más de 4 puntos porcentuales los supuestos incorporados en los CGPE26.

Subrayan que existen riesgos en el corto y mediano plazo que, en caso de concretarse, podrían afectar la perspectiva e inclusive la calificación soberana, resaltando la renegociación del Tratado de Libre Comercio (T-MEC).

Del lado positivo, una renegociación favorable podría resultar en un crecimiento de la inversión en sectores clave de la economía. Asimismo, en el corto plazo, una de las variables que podría favorecer la evolución de deuda neta es el comportamiento del tipo de cambio, dado que un nivel por debajo de los 19.0 pesos por dólar implica un ajuste cambiario positivo.

Entre los principales retos destaca que el sector público cuenta con un reducido margen de maniobra para continuar con una mayor consolidación fiscal ya que no se contemplan aumentos en las tasas impositivas (ISR o IVA).

Otro desafío es el incremento en el interés sobre el pago de la deuda (costo financiero), lo cual resta recursos que se podrían dirigir a la inversión productiva en el país, mientras que el nivel de gasto corriente se encuentra comprometido tanto en subsidios y transferencias como en otros gastos corrientes, en donde se encuentran etiquetados los principales programas públicos.

Acotan que un factor que ha contribuido a mantener cierta estabilidad en las finanzas públicas es el buen nivel de recaudación tributaria en ausencia de una reforma fiscal. El combate a la evasión fiscal, así como la dinámica en el consumo ha permitido que este rubro respalde el gasto sin incurrir en una mayor carga de deuda.

Sin embargo, un deterioro en los ingresos presupuestarios resultaría en altos niveles de déficits, que estimamos superiores al 4.0 por ciento del PIB para el mediano y largo plazo.  Otro elemento es el respaldo por parte del Gobierno Federal hacia Pemex, lo que podría proporcionar una mayor holgura hacia proyectos de inversión y generar balances financieros positivos para la empresa, con el efecto de reducir su nivel de endeudamiento en el mediano plazo.

Expectativas para periodos futuros

Reducción gradual del déficit presupuestario. Derivado del esfuerzo para contener el nivel de gasto y la eficiencia en la recaudación tributaria, proyectamos que a partir de 2026 el déficit en los RFSP empezará a descender, promediando un nivel de 3.7 por ciento de 2027 a 2032.

Con esto, se espera que la deuda neta, a pesar del incremento, mantenga una trayectoria sostenible, lo cual es congruente con su calificación. En este sentido, estiman que la deuda finalice 2026 en 53.7 por ciento del PIB y 54.5 por ciento en 2027, para posteriormente cerrar el periodo de proyección en 57.2 por ciento.

La Inflación continuará convergiendo gradualmente a la meta. A partir de 2026, la inflación podría situarse dentro del intervalo objetivo del Banco de México, promediando un nivel de 3.70 por ciento de 2027 a 2032.

Crecimiento económico más dinámico. En comparación con 2025, en los siguientes periodos se observarán mejores condiciones económicas, que permitirán crecer a una tasa de 1.70 por ciento en 2026 y de 1.85 por ciento en el largo plazo.

Loading

Comparte la nota
Continua leyendo
DA CLICK PARA COMENTAR

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.