Ve Santander una desaceleración ligera

Grupo Financiero Santander México anticipa una desaceleración más marcada en el segundo semestre del año, en comparación con la primera mitad. Sin embargo, su director general en México, Felipe García Ascencio, considera que por ahora es “ligera”, ya que algunos indicadores como el empleo y la inflación siguen mostrando buen comportamiento.

Estas declaraciones las hizo en el marco de la firma de una alianza con la Secretaría de Economía para capacitar e impulsar a las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPymes). García Ascencio señaló que el freno en algunos indicadores obedece al estrecho vínculo económico con Estados Unidos, pero aseguró que no hay motivos de preocupación, ya que el crédito continúa fluyendo.

“No vemos nada alarmante, pero sí observamos una desaceleración más marcada para el segundo semestre en comparación con el primero… Aun así, los clientes siguen solicitando crédito para autos, hipotecas”, dijo.

Respecto a un posible aumento en la morosidad, minimizó el riesgo al considerarlo parte del entorno financiero habitual.

“Son gajes del oficio, pero los niveles actuales son muy manejables. Lo más importante son los niveles de empleo; en este momento, la cartera vencida está por debajo de los dos dígitos y el PIB crece cerca de cero”, explicó.

México, beneficiado por el reacomodo político global

El directivo aseguró que México será uno de los países favorecidos por el reacomodo político global, al ofrecer mejores condiciones y menores tarifas en comparación con otras naciones.

“Eso nos ayudará a aumentar nuestra cuota de mercado”, afirmó.

García Ascencio reconoció que algunos indicadores en Estados Unidos muestran menor dinamismo, lo cual ha impactado directamente a México debido a la fuerte interdependencia entre ambas economías.

“Los consumidores han postergado decisiones de compra, y eso afectará el ritmo económico. En la segunda mitad del año veremos una desaceleración más clara”, comentó.

Por ello, enfatizó la importancia de concretar los planes de inversión en infraestructura para recuperar el empleo y darle un nuevo impulso a la economía, con miras a un 2026 más dinámico.

Finalmente, señaló que sus proyecciones de crecimiento para México en 2025 oscilan entre 0% y 0.5%. En cuanto al empleo, reconoció que sigue siendo alto, aunque su evolución dependerá de los acuerdos que se alcancen con el gobierno de Estados Unidos.

“Si esos acuerdos no se interrumpen, podemos estar tranquilos”, concluyó.