Bancos
Paridad dependerá de tasas, política comercial y aversión al riesgo

Gabriela Siller Pagaza, directora de Análisis Económico-Financiero en Grupo Financiero Base señala en un reporte que, para el resto del 2025, continúa el riesgo de alta volatilidad cambiaria y que los factores que muevan al tipo de cambio sean la política comercial de Estados Unidos, el diferencial de tasas de interés de México con Estados Unidos y la aversión al riesgo sobre México.
Agrega que en mayo el tipo de cambio ha disminuido hasta 19.3030 pesos por dólar y la volatilidad del tipo de cambio bajó de 17.82 por ciento en abril a 7.86 por ciento en mayo, de acuerdo con datos disponibles a mayo19.
De esta forma, la paridad peso dólar podría ubicarse en 19.80 en un escenario central, por arriba de 21.0 en una situación pesimista y 18.50 pesos por dólar en una coyuntura optimista, señalando las condiciones para cada uno de ellos:
Bajo un escenario central, el tipo de cambio podría ubicarse en promedio en 19.80 pesos por dólar, asumiendo que Donald Trump favorece la integración comercial de América del Norte y no se genera mayor aversión al riesgo sobre la economía mexicana ni en el mundo.
Se mantiene el amplio diferencial de tasas de interés entre México y Estados Unidos, permitiendo la estabilidad del tipo de cambio, además de que tampoco se dan recortes en la calificación crediticia de la deuda soberana.
Bajo un escenario adverso, el tipo de cambio podría subir por encima de 21.00 pesos por dólar, si se endurece la postura del gobierno de Estados Unidos con México.
En este escenario se asume que 1) se impone arancel a productos específicos clave a pesar del T-MEC o se limita de alguna manera la llegada de productos mexicanos a Estados Unidos, 2) se reanuda la retórica de renegociar el T-MEC, en lugar de hacer la revisión programada.
Además de la incertidumbre, contempla un mayor debilitamiento de la actividad económica, lo que provocaría que el Banco de México (Banxico) haga recortes más agresivos de la tasa de interés y propiciando especulación en contra del peso mexicano.
Bajo un escenario optimista, el tipo de cambio baja hacia 18.50 pesos si hay mayor colaboración entre México y Estados Unidos, dejando de lado la narrativa de renegociación del T-MEC, de imposición de aranceles o de regreso de la manufactura hacia Estados Unidos.
Bajo este escenario México ganaría más participación de mercado en las importaciones de Estados Unidos y se aumentaría (al menos la expectativa) la inversión extranjera directa, tanto de reinversión de utilidades como de nuevas inversiones
En relación a los factores que estarán afectando precisa lo siguiente:
1. La política comercial de Estados Unidos. La guerra comercial entre China y Estados Unidos sigue, por lo que no se pueden descartar episodios de aversión al riesgo si las negociaciones entre ambos países se prolongan o si se anuncian nuevos aranceles o restricciones al comercio.
Para México no ha desaparecido la amenaza arancelaria y es probable que en los próximos meses la atención de los mercados se centre en la revisión del T-MEC, que oficialmente está programada para julio del 2026 pero que podría adelantarse.
2. El diferencial de tasas de interés de México con Estados Unidos. Para 2025, en México se tiene una expectativa de crecimiento de 0 por ciento y de inflación al cierre de 3.6 por ciento anual, con lo que se espera que Banxico recorte la tasa de interés para ubicarla en 8.00 por ciento al final del 2025 (desde el 8.50 por ciento actual).
En Estados Unidos, se tiene una expectativa de crecimiento de 1.23 por ciento y de inflación al cierre de 2.5 por ciento, con lo que se espera que la Reserva Federal recorte su tasa en 50 puntos base, para dejarla en 4.00 por ciento en diciembre del 2025 (rango superior).
De esta forma, el diferencial de tasas de interés al cierre del 2025 se ubicaría en 450 puntos base, contribuyendo a la estabilidad del tipo de cambio en el año.
3. Aversión al riesgo sobre México por 1) la posibilidad de nuevas controversias comerciales y una mayor probabilidad de que la controversia en materia energética sea llevada a fase de panel, 2) las elecciones del Poder Judicial programadas para el 1 de junio y 3) la posibilidad de recortes de la calificación crediticia, que podrían afectar la especulación a favor del peso y generar presiones al alza para el tipo de cambio.