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Smart City Logistics agiliza de manera sostenible la entrega en ciudades
La pandemia detonó el comercio electrónico y con ello la logística y las entregas jugaron un papel determinante para que las personas tuvieran el producto lo más pronto posible en sus casas, así este mercado está provocando problemas de congestión y contaminación en las ciudades del mundo.
Las entregas deben consolidarse y las empresas deben trabajar juntas para encontrar la forma más eficiente y sostenible de entregar mercancías en los centros de las ciudades y aquí encontramos proyectos como el de origen noruego MIXMOVE, dentro del sector de la movilidad (Mobility & Smart Cities).
La empresa tecnológica considera que el 60 por ciento de la población mundial vivirá en ciudades en 2050, un reto que genera oportunidades para las empresas que trabajan en la sensorización de las ciudades y la creación de nuevas tecnologías para lo que se denomina Smart Cities o gestión inteligente de las ciudades.
El startup ha desarrollado una solución para la logística B2B, que permite hacer un seguimiento al detalle de los envíos de paquetes y determinar qué mercancías deben embalarse en qué camión-contenedor para optimizar la utilización de la capacidad. Sus soluciones de software basadas en la nube permiten a sus clientes aumentar su eficiencia y obtener total visibilidad y control de sus operaciones.
“Con el aumento de la urbanización y el rápido crecimiento del comercio electrónico, las soluciones logísticas urbanas optimizadas son importantes para reducir nuestra huella de carbono y crear centros urbanos más verdes”, explicó la empresa en un comunicado.
Hay oportunidades en soluciones que faciliten la gestión de residuos, del alumbrado público, del agua, de la movilidad, la reducción de ruidos, entre otros, proveyendo de datos que permitan tomar decisiones en tiempo real según las necesidades del momento.
Mario Pani y la ciudad inteligente
El concepto de Ciudad Inteligente va mucho más allá del aprovechamiento de la tecnología. En México, desde 1949, el arquitecto Mario Pani, con su visión para el Multifamiliar Miguel Alemán, marcó el incipiente inicio de las Smart Cities en América Latina.
Por definición, en las Smart Cities o Ciudades Inteligentes, se aplican las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) con el objetivo de proveerlas de infraestructuras que garanticen un desarrollo sostenible, una creciente calidad de vida para ciudadanos, mayor eficacia de los recursos y una participación ciudadana activa.
Pero el concepto, según sea el análisis, es mucho más amplio. Se requieren diseños inteligentes en calles, movilidad, reducción de costos, tiempos y riesgos del transporte, menores riesgos de contagio, que generen salud, conexión digital, que prevengan accidentes, que cuenten con servicios inteligentes, educación accesible, seguridad, políticas participativas y gestión administrativa eficaz, entre otros temas.
Un plan inteligente, o Smart Plan, por su traducción al inglés, debe aspirar a ser sencillo, medible, accionable, realista y con tiempos cortos de implementación.
Las cinco ciudades más inteligentes
Según el Smart City Index, realizado en 2022 por la consultora Juniper Research y la empresa tecnológica Intel, estas son las cinco ciudades más inteligentes y eficientes del planeta en términos de movilidad, salud, seguridad y productividad:
SHANGHAI. La ciudad china ha destacado este año debido al Shanghai´s Citzen Cloud, una plataforma de datos donde se pueden encontrar más de mil 200 servicios que pueden necesitar los ciudadanos de la ciudad. Este sistema es la mejor forma para contactar también con el gobierno de la ciudad además de tener un solo teléfono para poder hablar, sin necesidad de buscar uno en concreto para cada departamento.
SEÚL. La capital surcoreana ha destacado desde hace más de veinte años en el desarrollo de la ciudad y actualmente están realizando diversos proyectos como es la utilización de robots patrulla autónomos y la utilización de balizas inteligentes para impedir la desaparición de niños al transmitir señales constantes para seguir la ubicación en tiempo real.
BARCELONA. La ciudad española es la única europea que entra dentro del top 5, gracias en parte a un sistema de transportes que utiliza en su mayor parte un sistema renovable y que funciona con rutas diagonales por la ciudad. Además, el alumbrado público es a través de LED y los residuos son enviados en contenedores inteligentes, lo cual ayuda al progreso de la ciudad.
BEIJING. Una tarjeta virtual es la encargada de gestionar todos los documentos de identidad de los ciudadanos, mientras que todo el transporte público puede pagarse a través de los teléfonos. Respecto a la notable contaminación en la ciudad, se han identificado las mayores fábricas contaminantes y son obligadas a cerrar por completo siempre que no tengan producción.
NUEVA YORK. El epicentro de la economía mundial ha progresado en los principales problemas de consumo de energía y de agua que tenía hasta hace unos años, incluyendo un sistema de lectura automática de los contadores. Igualmente, se ha conseguido mejorar la eficiencia de la recogida de basura gracias a chips y contenedores que funcionan con energía solar.
Todas estas ciudades son un ejemplo de reinvención, pero en paralelo han ido surgiendo nuevas metrópolis 100 por ciento inteligentes. Tal es el caso de Másdar (Dubái), una ecociudad totalmente sostenible y sin coches; Dongtan, situada en las proximidades de Shanghái y donde solo se usarán energías renovables y se reciclarán casi la totalidad de los residuos generados; o Apern que, a solo 14 kilómetros de Viena, incluirá sistemas de movilidad y edificios sostenibles, utilización eficiente de recursos energéticos renovables y agricultura urbana.
Según el Smart City Index, el gasto en la tecnología invertida en estas ciudades se ha duplicado desde 2018 hasta la actualidad, con el objetivo de reducir costes o reducir el impacto medioambiental o mejorar la eficiencia dentro de la propia ciudad. Mientras que esto ocurre, el mercado de ciudades interesadas sigue aumentando y está previsto que para 2030 el trozo de mercado sea siete veces mayor que lo que tenemos actualmente.
Diferentes estudios estiman que en 2020 la actividad relacionada con las smart cities supondrá un volumen de negocio de aproximadamente unos mil 500 billones de dólares en todo el mundo. Esta cifra supone un signo inequívoco de que la inversión y la apuesta por este tipo de entornos urbanos seguirá creciendo de manera exponencial durante los próximos años.