Economía
Déficit de PEMEX aumentó su deuda al 3T20: HR Ratings
Víctor M Ortíz Niño
Los analistas de la calificadora mexicana HR Ratings señalan en un estudio que el fuerte déficit ha resultado en un notable incremento en su deuda porque fue financiado básicamente con emisión de deuda denominada en moneda extranjera, seguido de emisión de deuda denominada en pesos y la utilización de efectivo.
En el estudio “Pemex al tercer trimestre Una pérdida neta para el Estado mexicano” demuestran que el impacto más relevante sobre la deuda provino del efecto de la depreciación del peso. Esto se reflejó en el hecho de que mientras que su deuda neta total subió 26.9% desde su cierre de 2019, la deuda externa bruta en dólares avanzó el 9%.
Comentan que el déficit financiero de Pemex al tercer trimestre del 2020 (3T20) alcanzó los 216.9 miles de millones de pesos (mm), cifra que es sustancialmente mayor a las pérdidas de 83.8mm y de únicamente 9.9mm en 2019. Sin embargo, si la idea es medir el desempeño operativo de Pemex, incluyendo su costo financiero, es importante considerar que estos números distan mucho de ser los más relevantes, ya que el cambio en el déficit financiero se encuentra muy relacionado a la política fiscal del Gobierno Federal y no únicamente en su desempeño operativo.
Manifiestan que los resultados de Pemex al tercer trimestre muestran un fuerte incremento en su déficit financiero, por lo que, durante dicho periodo, la empresa estatal muestra una aportación negativa al Estado mexicano; esto contrasta con el beneficio que Pemex otorgó, durante los mismos periodos de 2018 y 2019 al Estado. Destacan que la deteriorada situación financiera, es resultado tanto de la caída en sus precios de venta como de la disminución en sus volúmenes de venta.
Sobre el volumen de ventas, opinan que su pérdida de volumen está relacionada no únicamente al entorno macroeconómico actual sino también a una pérdida de participación en el mercado nacional. Esto a su vez implica que, aun suponiendo que la demanda regrese a los niveles anteriores a la pandemia, una recuperación relevante para Pemex podría requerir que la empresa ya no pierda más terreno contra los particulares, o inclusive que recupere algo de lo cedido.
Esta situación es especialmente relevante, si se considera que la prioridad de la administración actual es la refinación o procesamiento interno de crudo, y que Pemex necesita ser competitivo a nivel internacional frente a refinerías internacionales. Bajo este contexto, se abre la posibilidad de políticas cada vez más agresiva cuyo objetivo final sería cerrar el mercado nacional a competidores privados.
En lo que refiere a sus ventas externas netas y su balance comercial, el deterioro en su mercado doméstico implicó pasar de un resultado deficitario a un resultado superavitario. Por otro lado, aunque la reducción en los precios internacionales ha disminuido el déficit petrolero del sector privado, la disminución ha sido mitigada por el incremento en sus importaciones derivado de un avance en sus ventas nacionales, de acuerdo con nuestras estimaciones. Este incremento se presenta a pesar del entorno macroeconómico y es la consecuencia de un aumento estimado en su participación del mercado.
En este contexto es importante considerar que operativamente, en el acumulado a septiembre de 2019, se observa un desempeño deteriorado vs. el mismo periodo de 2018. Al tercer trimestre del 2019 (3T19), las ventas brutas de Pemex disminuyeron en 111.7 mm para ubicarse en 571.5 mm. La caída en las ventas internas fue aún mayor, considerando que las ventas externas tuvieron un desempeño mejor con una reducción en su déficit.
El deterioro en las ventas internas fue más que compensado por la reducción en los Derechos y Enteros (D&E) por 67.1mm y por el incremento en los ingresos diversos derivados principalmente como resultado de las transferencias recibidas del Gobierno Federal por 113.9mm, con un efecto positivo total de 181.1 mm.