Columna En Concreto
Asuntos del Peso
Peso mexicano reafirmaría sus cotizaciones nuevamente por debajo de los 18.50 pesos ante relativa tranquilidad del sistema financiero estadounidense
El mercado de cambios local ingresará dentro de un ambiente de movimientos relativamente tranquilos, observándose negociaciones por debajo de los 18.50 pesos por dólar, descontando la perspectiva de un segundo incremento en la tasa de referencia del Banco de México (Banxico).
El evento más importante a tomar en cuenta para esta semana es el anuncio de política monetaria del Banxico, el cual está previsto para el próximo 30 (jueves) de marzo, donde la mayoría de los analistas del medio financiero esperan un incremento de 25 puntos base para ubicarse en 11.25%.
En semanas anteriores, los participantes del mercado pronosticaban un incremento de 50 puntos base, sin embargo, con el anuncio de la inflación (jueves) correspondiente a la primera quincena de marzo, la cual resultó relativamente positiva al registrar una cifra de 7.12% a tasa anual, contra lo observado el mes pasado de 7.48%, cambió el pronóstico a un cuarto de punto.
La inflación local presenta menores presiones alcistas quizá apoyada un poco por la revaluación del peso mexicano, aunque deberíamos de permanecer un tanto cautelosos por la reciente depreciación de la moneda mexicana dentro de un contexto de mayor volatilidad en los mercados financieros globales.
El incremento en la aversión al riesgo impactó a la mayoría de los activos de países emergentes, además, de las materias primas tras los mayores temores de una recesión mundial, que previsiblemente comenzaría en el último trimestre de este año sobre todo en Estados Unidos.
Los riesgos se encuentran balanceados, por un lado, la incertidumbre sobre las quiebras de los bancos estadounidenses, y por el otro, el mejoramiento de la inflación interna, como quiera que sea, lo más importante es que en entorno global no afecte al comportamiento del tipo de cambio peso-dólar.
La moneda mexicana seguirá reaccionando a los eventos internacionales, por lo que, no hay que perder de vista la continuación del nerviosismo sobre la estabilidad del sistema financiero de Estados Unidos y Europa, ahora con el posible contagio del banco alemán Deutsche Bank.
En Estados Unidos, la secretaria del Tesoro, Janet Yellen comentó que están preparados para tomar “medidas adicionales” en caso de que estén en riesgo los depósitos de la banca, lo que podría evitar fuertes movimientos volátiles en los mercados, aunque, con esos comentarios envió en mensaje de que no se podría descartar una crisis financiera.
En Europa resurgió la reversión en el mercado financiero, luego de que Deutsche Bank anunció la amortización anticipada de 1,500 millones de dólares de bonos Tier 2 con vencimiento en el 2028, instrumentos que tienen como objetivo mejorar la calidad de la solvencia del banco alemán.
A pesar de que el banco no se encuentra en una situación crítica como fue el caso de Credit Suisse, la sensibilidad de los mercados ocasionó volatilidad cambiaria, pérdidas en el mercado de capitales y elevó la demanda por instrumentos libres de riesgo durante la sesión del viernes pasado.
En el corto plazo, bajo el supuesto de que los problemas bancarios en Estados Unidos permanecen contenidos, combinado con la reciente dinámica del dólar (debilitamiento), los sólidos fundamentos macroeconómicos y la perspectiva positiva de entrada de flujos por exportaciones, remesas, turismo e inversiones relacionadas al “nearshoring”, es posible que la moneda mexicana regrese hacia los niveles de 18 pesos por dólar.
Es importante destacar que los participantes del mercado continuarán atentos al desenlace de las noticias del sector bancario en Estados Unidos y Europa, ante los temores sobre la situación de otras instituciones, tales como Deutsche Bank.
Además, habría que estar atentos a los anuncios de política monetaria de algunos bancos centrales, como el Banco de México, Hungría, República Checa, Tailandia, Colombia y Sudáfrica y los comentarios de miembros de la Fed (Barkin y Williams).
En Estados Unidos, se publicarán encuestas regionales de manufactura del Fed (Dallas y Richmond) y el PMI de Chicago, balanza comercial, inventarios mayoristas, precios de vivienda, consumo personal, confianza al consumidor, solicitudes de seguro de desempleo, ingreso personal y gasto de consumo.
En la parte interna, aparte del anuncio de política monetaria del Banxico, se publicará la balanza comercial, finanzas públicas, crédito bancario y tasa de desempleo.