FINANZAS
Se desacelera envío de remesas
Juan José Li Ng, analista de BBVA Research, recuerda que en el Observatorio de Migración y Remesas del mes de marzo, ya se advertía de una evidente desaceleración en dólares en la llegada de remesas a México, situación que se confirma con los datos del Banco de México, el cual informó que ingresaron a México 5,021 millones de dólares por concepto de remesas familiares durante el mes de marzo de este año, lo que representa una caída de 3.3 por ciento en comparación al mismo mes del año anterior.
Lo anterior contrasta con la situación que se presentó entre enero y octubre de 2023, donde las remesas promediaban un incremento de 8.9 por ciento, para el periodo entre noviembre de 2023 y febrero de 2024 el incremento fue de 2.6 por ciento en promedio, con un intervalo entre 1.2 por ciento y 3.7 por ciento.
De esta manera, las remesas culminan una racha de 46 meses consecutivos con crecimiento, que duró entre mayo de 2020 hasta febrero de 2024. Durante este periodo de frenesí de casi 4 años, las remesas aumentaron en términos anualizados de 38,800 a 63,600 millones de dólares, lo que equivale a un crecimiento total de 64.1 por ciento en estos 46 meses.
En términos reales, las remesas se contrajeron 15.2 por ciento en marzo de 2024
El efecto final en los bolsillos de las familias receptoras de remesas en el país es todavía mayor, porque además de la caída en dólares registrada en las remesas y el factor inflacionario (4.4 por ciento), se debe considerar que marzo fue uno de los meses en el que el precio del dólar estadounidense cayó por debajo de los 17 pesos, lo cual se traduce en menos pesos al momento del cobro.
Así, en marzo de 2024, con un tipo de cambio promedio de 16.84 pesos por dólar, México recibió cerca de 84,600 millones de pesos por remesas, lo que equivale a una contracción de 15.2 por ciento en términos reales en los ingresos por este concepto para los hogares receptores.
No solo en México, también en El Salvador (-4.9 por ciento) y Honduras (-4.6 por ciento) las remesas cayeron en el mes de marzo
Al analizar el comportamiento del flujo de las remesas hacia otros países de América Latina y el Caribe, se ve que México no fue el único país de la región en el cual se contrajeron durante marzo. Durante ese mes, las remesas a El Salvador cayeron 4.9 por ciento y a Honduras disminuyeron 4.6 por ciento. También se observa que las remesas a Guatemala, Nicaragua, República Dominicana y Colombia se desaceleraron en marzo, en comparación a lo que recibieron en los meses de enero y febrero.
Li Ng considera que puede haber dos posibles explicaciones a este fenómeno, la primera puede deberse a factor calendario o estacional, debido a que el jueves y viernes de la Semana Santa de 2024 tuvo lugar en la última semana hábil del mes de marzo.
Lo anterior pudo ocasionar que en esa semana algunas personas no enviaran dinero a sus familiares, por las dificultades para cobrarlas en los países de origen. Esto sugeriría que no hubo afectaciones estructurales en el flujo de remesas a la región, sino simplemente parte de las remesas se trasladarían para ser cobradas y contabilizadas en los primeros días de abril.
Una segunda hipótesis sobre la desaceleración reciente de las remesas a la región podría explicarse por una cuestión estructural, en el que la economía de Estados Unidos (principal país de destino de la migración de la mayoría de los países de la región) ya estaría llegando a un nivel en el cual es menos fácil absorber a la fuerza de trabajo migrante.
Esto debido al importante flujo de migración y de refugiados que ha recibido ese país desde finales de 2020 y hasta la fecha. En promedio, en 2023 y lo que va de 2024, se han registrado mensualmente más de 200 000 aprehensiones e inadmisiones de migrantes en la frontera sur de Estados Unidos.
Adicionalmente, el sector industrial en México, dominado por las manufacturas, acumulan dos trimestres con contracciones (4T23 y 1T24)2, explicado en parte por una menor demanda de bienes duraderos en Estados Unidos.
De esta forma, se debe estar al pendiente de los datos que surjan en estos meses para poder entender si la desaceleración reciente de las remesas a México, y a varios países de América Latina y el Caribe, se explica por un factor estacional o estamos ante indicios de una posible desaceleración económica en Estados Unidos.