Inversión debajo de niveles prepandemia

Esto, aunque el crecimiento anual fue de 7.6%

En el análisis semanal “CIAL Dun & Bradstreet: Monitor Económico” se señala que, en octubre de 2021, la inversión fija reportó un crecimiento de 7.6% anual, lo que pareciera una buena tasa; sin embargo, este avance compensa parcialmente la caída de 13.9% anual de octubre de 2020 y significa que el rebote que se está observando es parcial, por lo que el nivel de inversión está aún lejos de reponerse de la crisis de 2020. Hoy, la inversión se ubica casi 4% por debajo de la prepandemia, con el agregado de que, desde marzo del año pasado, la inversión se ha mantenido lateral, inclusive con un ligero descenso.

Consideran que una vez más, si la inversión no crece alrededor de 8% al año, es difícil que el Producto Interno Bruto (PIB) crezca al 4% deseado (meta del gobierno).

En el texto se indica que el entorno para la inversión es sumamente complejo, especialmente para el segmento privado. Aunque el entorno económico no es malo, el ambiente sociopolítico es negativo, razón por la cual los inversionistas se mantienen en un compás de espera para canalizar sus recursos a la ampliación de la planta productiva.

Opinan que esta espera podría ser larga, dado que no hay señales de políticas públicas en pro de la inversión. Por el contrario, hay decisiones que desalientan la inversión, tanto la nacional como la extranjera.

El año pasado, la inversión del país habría crecido 9.9% real. Siendo optimistas, su avance sería cercano al 5% en los siguientes años, a pesar del cual no se podrá igualar su máximo histórico de 2018 sino hasta después de 2024. En 2021, la inversión habría sido alrededor de 254,000 millones de dólares, una cifra equivalente a solamente 19.9% del PIB y con expectativas de una mejora apenas marginal hacia el cierre de este sexenio (21% en 2024).

Solo como referencia: China invierte cada año más de 40% del PIB. No hay manera más efectiva de hacer crecer la economía sino a través de la inversión. El país se está rezagando en esta materia y cada vez se reduce el potencial de nuestro crecimiento. Es el mayor reto que enfrenta el gobierno, desde antes.

El consumo privado avanza marginalmente

El consumo privado es el principal componente de la economía, al representar aproximadamente 60% del PIB, por arriba de la inversión (20%), el consumo del Gobierno (12%) y de las exportaciones (3%). Al final del día, lo que pase con la economía está determinado, fundamentalmente, por la trayectoria del consumo privado.

Lo anterior depende de las condiciones del empleo, que hoy ya reportan una recuperación tras la crisis de 2020, además de las remuneraciones reales, que han logrado avances importantes en estos años.

En los meses recientes, el nivel del consumo privado ha avanzado mínimamente, de forma que, en octubre, dicho nivel se ubicaba aún 3% por debajo de la prepandemia (febrero de 2020). Aunque en ese mes reportó una tasa de 6.8% anual, se compara contra su caída de 9.2% de un año antes. Esto significa que el rebote sigue siendo parcial e insuficiente para dejar atrás la crisis de 2020

El turismo se va recuperando, pero el reto es grande para 2022

Los analistas manifiestan que, si en febrero de 2020 ingresaban al país 2,349 millones de dólares por concepto de turismo internacional, en abril dicha entrada era de apenas 130 millones de dólares. Se trataba de una caída de más del 94% anual en el peor momento de esa coyuntura, cuando se restringieron todas las actividades económicas en México y el mundo; esta industria sufría una parálisis casi total. Desde entonces, la recuperación ha sido gradual. En noviembre de 2021 ingresaron 2,133 millones de dólares, creciendo 148.9% anual y tratándose de un rebote importante.

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A pesar de ello, éste se ubica ahora casi 10% por debajo de la prepandemia, aunque con mejores expectativas para este año. Sin embargo, la variante Ómicron empieza a limitar el turismo internacional, lo que podría dificultar su salida de la crisis. Por lo pronto, la entrada de viajeros internacionales está lejos de su recuperación, lo que significa que las tarifas turísticas se han elevado considerablemente.