OPINIÓN
Asuntos del Peso
Mercado estará atento al dato de inflación correspondiente a abril de EU, estimado en 3.6%.
La mayoría de los participantes del mercado estarán atentos al anuncio del dato de inflación correspondiente a abril de Estados Unidos (EU), el cual se dará a conocer el miércoles, donde los analistas del sector privado estiman una cifra de alrededor de 3.6% a tasa anualizada, aunque es importante destacar que en marzo registró un dato de 2.6%.
El tipo de cambio peso-dólar bajo este contexto podría cotizar nuevamente por arriba de los 20.0 pesos por dólar, debido las actuales presiones inflacionarias derivadas del incremento básicamente del mercado de commodities, como el petróleo, metales y granos entre otros.
El crudo referencial estadounidense West Texas Intermediate (WTI) durante el presente año registra un incremento de 34.87%, al pasar de un precio de 48.52 a 65.34 dólares por barril, mientras la plata en un año creció su precio 50%, luego cambiar su cotización de 18.47 a 27.62 dólares la onza y el maíz registró un aumento en su valor del 92%, al pasar de 381.25 a 731.12 dólares por tonelada.
En semanas anteriores el presidente de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, Jerome Powell ha comentado que las recientes presiones inflacionarias son de carácter coyuntural, sin embargo, la mayoría de los participantes del mercado no creen esta percepción del directivo de Fed.
El mercado de bonos a largo plazo se encuentra presionado y volátil ante el pronóstico de futuras presiones inflacionarias, como el caso del bono a plazo de 10 años que a principios de este año su cotización se encontraba en 1.35%, sin embargo, las cotizaciones han alcanzado nivel de 1.85%.
La semana pasada, el bono a plazo de 10 años estadounidense mostró un relajamiento al finalizar el viernes previo en una tasa de interés de 1.58%, derivado en parte del decepcionante reporte del mercado laboral, el cual resultó por debajo del pronóstico de los analistas.
El tipo de cambio peso-dólar bajo ese contexto mostró una recuperación sobresaliente frente al dólar estadounidense, tras presentar una apreciación de 1.39%, esto es una ganancia de 28.20 centavos para ubicarse en un precio de 19.9530 pesos por billete verde.
La magnitud del movimiento del bono a plazo de 10 años estadounidense no implica un cambio tendencia de este instrumento de inversión, sin embargo, el mercado de bonos seguirá con movimientos volátiles en las próximas semanas, afectando el comportamiento del peso mexicano.
Es importante mencionar que, si bien el reporte de empleo de Estados Unidos, resultó mucho más débil de los esperado y genera dudas sobre la fortaleza de la recuperación económica, probablemente este dato sólo ha sido una pausa dentro de una tendencia de sólida recuperación del mercado laboral.
Los ingresos de los trabajadores por hora aumentaron de manera relevante, sumando otros indicadores que muestran posibles presiones inflacionarias bajo un contexto de alza en los precios de los commodities como lo comentamos anteriormente.
Las tasas de interés de los bonos estadounidenses de largo plazo seguirán presionadas, con la perspectiva de seguir aumentando su rendimiento en los próximos meses, por lo que hacia finales de este año existe el pronóstico de que el bono a plazo de 10 años podría alcanzar una tasa del 2.15%.
En el Mercado de Futuros de Chicago (CME), los inversionistas les están apostando a que el peso mexicano se deprecie, por lo que, la posición especulativa en contra de la moneda mexicana se encuentra en 110 millones de dólares con cifras al cierre del 4 de mayo.
Sin embargo, la semana previa, la tenencia de los inversionistas se encontraba a favor del peso mexicano con una cifra de 24 millones de dólares, como quiera que sea los participantes del mercado están anticipando una nueva depreciación del tipo de cambio peso-dólar en las próximas semanas.