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Asuntos del Peso
El peso mexicano seguirá manteniendo un “piso” fuerte en niveles de 17 pesos durante la segunda parte del 2023
La mayoría de los inversionistas del mercado de cambios seguirán animados en los próximos trimestres de este 2023, es decir, el peso mexicano previsiblemente mantendría cotizaciones relativamente estables durante el periodo antes mencionado, manteniendo sus niveles de operación por debajo de los 17.50 pesos por billete verde.
En ese contexto, el tipo de cambio peso-dólar es probable que mantenga un rango de operación entre 17.0 pesos como cotización mínima y 17.75 pesos por dólar como nivel máximo, aunque, podrían existir algunos altibajos generados principalmente por la evolución de la política monetaria externa (EU).
La perspectiva de equilibrio de la moneda mexicana sería explicada básicamente por el entorno positivo de la economía mexicana, sobre todo la percepción de menores presiones inflacionarias previstas en los próximos meses, con el pronóstico de que los precios al consumidor se ubiquen por debajo del 5% al cierre de este año.
La expectativa de seguir avanzando la economía mexicana en los siguientes trimestres combinado con la posibilidad de no caer en recesión la economía estadounidense como se había pronosticado apenas hace algunos meses, serían otros de los factores que apoyarían la fortaleza de la paridad cambiaria.
En el mercado de cambios existe la expectativa que antes de que finalice este verano el peso mexicano podría romperé el “piso” de los 17 pesos por dólar para alcanzar un precio de 16.80 pesos, aunque, esta posibilidad se ve muy poco probable, pues como sabemos lo que explica la fortaleza de la divisa mexicana es el endurecimiento de la política monetaria.
En este segundo tramo del año 2023 no se vislumbra que el Banco de México (Banxico) aumente su tasa de interés de referencia que actualmente se encuentra en 11.25%, debido a que aparentemente con este nivel tasas la política monetaria está sirviendo para contrarrestar las presiones inflacionarias actuales.
El único motivo fuerte que podría incentivar al Banxico a incrementar su tasa objetivo sería que la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos tome la decisión de aumentar su tasa de interés, dado que de hacerlo podría perder atractivo el mercado mexicano para los inversionistas extranjeros al ofrecerles una menor tasa.
El mercado mexicano de acuerdo a los niveles actuales (11.25%) en comparación con el rendimiento ofrecido por el mercado estadounidense (5.25%), mantiene un diferencial de 600 puntos base, que es el pago al riesgo-país exigido por los inversionistas extranjeros para invertir en el mercado mexicano.
Es posible que los inversionistas sigan atentos a la evolución de las variables fundamentales de la economía como, el Producto Interno Bruto (PIB) y la inflación, así, como el comportamiento de la política monetaria divergente de algunas economías avanzadas (EU y Eurozona) con ciertos incrementos y economías emergentes iniciando un ciclo de recortes, tras haber llevado las tasas de referencia a nivel muy elevados.
Sin embargo, algo que podría afectar la evolución positiva del tipo de cambio peso-dólar, sería la incertidumbre sobre el proceso electoral llevada a cabo en el próximo año, actualmente las noticias con relación a los posibles candidatos, no han generado movimientos volátiles en la moneda mexicana.
En esta semana, los participantes del mercado estarán atentos básicamente al anuncio de las minutas de los bancos centrales de Estados Unidos y México, donde habría que seguir los comentarios anunciados por estos bancos centrales sobre todo existen pistas con relación a la expectativa de mediano plazo de las tasas de interés.
Además, se esperan las decisiones de política monetaria en países como, Australia, Rumania, Malasia y Polonia. En el frente económico, los más importantes será la nómina no agrícola de junio que anunciará en Estados Unidos. En China se publicarán los datos económicos del índice manufacturero y no manufacturero correspondientes a junio.
En México se espera la publicación de remesas familiares, la encuesta de expectativas del Banco de México, reservas internacionales, la inversión fija bruta al mes de abril, consumo privado y confianza al consumidor, pero el dato más importante será el anuncio de la inflación al mes de junio y cierre del primer semestre del 2023.