Economía
Pérdida dinamismo económico y depreciación moderada a fin 2023
Pese a las mejorías en los datos observados durante el primer se trimestre del 2023 y que las perspectivas para lo que resta del año detonan un incremento en el pronóstico de crecimiento de la economía (PIB) para 2023, se anticipa una pérdida de dinamismo en la actividad durante la segunda mitad del año, señala Jessica Roldán, economista en jefe de Casa de Bolsa Finamex.
Durante la presentación de sus “Perspectivas macroeconómicas rumbo a la 2a mitad de 2023”, la especialista detallo que para el cierre del presente año estima un PIB de 2.5 por ciento, con un nivel de inflación al consumidor del 5.0 por ciento, una inflación subyacente del 5.6 por ciento, con un tipo de cambio de 17.90 pesos por dólar y una tasa interbancaria a un día de Banco de México (Banxico) de 10.75 por ciento.
Lo anterior debido a que recientemente se ha observado una visible disminución en ciertas presiones inflacionarias; sin embargo, continua esperando que la reducción de la inflación subyacente sea gradual, sobre todo en lo que a precios de alimentos procesados y servicios se refiere.
A pesar de ello, considera que Banxico tendrá espacio para recortar la tasa de referencia en sus reuniones de política monetaria de finales de año (noviembre y diciembre), movimientos que seguirán siendo consistentes con una postura relativamente restrictiva.
Con respecto a otras economías, el panorama de corto plazo del país se mantiene favorable, en ausencia de eventos de riesgo, la volatilidad en los mercados nacionales será acotada y la moneda mantendrá su fortaleza pero anticipa que registre una tendencia a la depreciación hacia finales de año.
En relación a los pronósticos de 2024 señaló que el PIB de 1.7 por ciento, con un nivel de inflación al consumidor del 4.2 por ciento, una inflación subyacente del 4.1 por ciento, con un tipo de cambio de 18.80 pesos por dólar y una tasa interbancaria a un día de Banxico) de 8.0 por ciento.
De esta forma, en el mediano plazo el país continúa enfrentando retos importantes, entre ellos la mejora estructural de las finanzas públicas y la renovación de los motores internos de crecimientos; asimismo, el nearshoring puede ser una gran oportunidad en el segundo frente, para ello será necesario implementar políticas dirigidas a su correcto aprovechamiento.