Economía
Inflación está llegando a máximos: Templeton
Llegaría a su pico máximo a finales de diciembre
Luis Gonzalí, VP/Co-Director de Inversiones en Franklin Templeton México, señala en un estudio que usando el último consenso de Banxico para inflaciones mensuales, se puede ver que la inflación tocaría su pico a finales de este año, para después empezar a bajar paulatinamente, lo que involucra que el consenso de economistas en el mercado mexicano espera que no existan presiones inflacionarias adicionales tan fuertes como las que vimos durante 2021 lo cual va en línea con lo esperado por el Banco Mundial y su pronóstico sobre los precios de las materias primas.
En su estudio “Perspectivas sobre inflación y política monetaria para 2022”, el analista indica que su escenario base es que la inflación cierra el año en 7 20%.
¿Hacia dónde va la política monetaria en México?
Si el escenario expuesto se concreta, es altamente probable que Banco de México (Banxico) entre en una pausa tan pronto como en su primera junta del año, de tal forma que la tasa de cierre de 2021, entre 5.25% y 5 50% permanecerá sin cambios durante la primera mitad del 2022.
Desde su punto de vista, el argumento usado por Banxico será que nunca estuvieron en un ciclo restrictivo de tasas, que los aumentos observados durante 2021 fueron precautorios, y que la inflación ha empezado a ceder, Sin embargo, es altamente probable que una vez que la Reserva Federal Estadounidense (FED) comience su ciclo de alza de tasas, Banxico reanude el suyo para evitar distorsiones en el mercado cambiario, que podrían traer inflación hacia adelante.
En este sentido, en el segundo semestre de 2022 es probable que Banxico vuelva a subir su tasa de interés entre 0.50% y 0.75% totalmente contingente a las acciones de la FED para terminar el año en un rango entre 5.75% a 6.25%.
De esta manera su escenario base planteado, podría cambiar conforme vaya avanzando el 2022 y se vaya conociendo cómo se van desenvolviendo las distintas variables macroeconómicas en México y el mundo
Gonzalí recuerda que 2021 empezó con una oferta deprimida de bienes, algo normal tras un año recesivo, pero una demanda rampante (lejos de ser normal, e impulsada por los estímulos fiscales). Ese desequilibrio entre oferta y demanda generó escasez y una subida importante de precios, sobre todo, en materias primas y energéticos, generando un alza promedio de 33% en los precios de materia prima en un solo año.
Esta alza no es normal y no se había observado desde 1979 cuando el índice subió alrededor del 56%, incluso en el “super ciclo” de materias primas commodities observado entre 2002 2007, el año en el que el índice tuvo su mayor subida fue en 2002 con un crecimiento del 24% y en todo ese lapso (6 años) el índice se apreció alrededor del 100%. En el caso de 2021 el índice subió una tercera parte de lo que subió en todo el super ciclo anterior … ¡Una locura!
El especialista recuerda que el Banco Mundial publicó en octubre su perspectiva semestral respecto a los mercados de commodities, y parte de su conclusión es que esperan una normalización de la demanda a nivel global que quitaría presiones a los precios de diversas materias primas y evitarían que sigan subiendo.
En 2021 la inflación en México se vio bastante afectada por la dinámica global de precios, particularmente por el aumento en materias primas, es decir, la inflación no subyacente. A la primera quincena de noviembre, el índice general de inflación (había subido 7.05% anual que fue la inflación más alta en los últimos 20 años, el índice subyacente se colocó en 5.53% y el no subyacente en 11.68%.
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Indica que a pesar de que el índice subyacente pesa 75% del INPC y la no subyacente pesa solo 25%, la inflación general se ha visto mucho más afectada por la inflación no subyacente que por la subyacente.
Por otro lado, la inflación subyacente también se ha visto contaminada por la fuerte subida de la inflación no subyacente, sobre todo en el rubro de Mercancías, y particularmente en Mercancías Alimenticias Las Mercancías Alimenticias son todos aquellos alimentos y bebidas que tienen un nivel de procesamiento, por ejemplo, la tortilla, el pan dulce, los alimentos enlatados, etc.
Al tener como materia prima los productos agropecuarios, los cuales han subido 9% los últimos 12 meses, el aumento en los costos termina por traspasarse a los precios de dichos alimentos procesados En ese sentido, las mercancías alimenticias son las que más han aportado a que la inflación subyacente se mantenga alta
¿Qué podemos esperar para la inflación mexicana en 2022?
Para contestar la pregunta Gonzali señala que hay que precisar algo que a mucha gente se le escapa cuando piensa en la inflación, esto es, que la inflación baje no significa que los precios vayan a bajar. Caer en este error es bien común porque la inflación no se mide por el nivel de precio de un bien o servicio, sino por el cambio de precio de ese bien o servicio, pero el consumidor promedio tiende a pensar al revés.
De esta forma, la inflación es el agregado de los cambios en los precios de bienes y servicios, por lo que, si los precios no cambian, la inflación es cero
Entonces, se requerirían presiones adicionales a las ya observadas para ver a la inflación subir, y la palabra clave es “Si no hay presiones adicionales, como, por ejemplo, precios de commodities subiendo aún más, que no es lo que se espera, los precios tenderán a permanecer estables, y la inflación tenderá a bajar.
Por otro lado, existe el caso de los efectos de segundo orden, es decir, presiones inflacionarias ya realizadas en commodities, que pueden permear en bienes y servicios conforme pase el tiempo.
Sin embargo, es altamente probable que estos efectos de segundo orden sean menores pues el rubro de Mercancías, ya trae reflejadas gran parte de esta subida de precios (los productores, al usar materia prima perecedera como los productos agropecuarios, no pueden tener un gran nivel de inventario para amortiguar el efecto de la subida de precios, por lo que su costo variará según los precios, y dicho costo será transmitido al consumidor final en forma de inflación).
Lo anterior lo podemos observar en los datos mientras los productos agropecuarios han subido 9% en los últimos 12 meses, las mercancías alimenticias han subido 7.52% un traspaso casi uno a uno.