Nearshoring oportunidad de estabilidad a largo plazo

El nearshoring representa para México la oportunidad de crecimiento económico y estabilidad para el largo plazo, mientras que para otras economías es solo otra fuente más de crecimiento, pero requiere que el gobierno federal establezca una buena gobernanza, una política de estímulos fiscales y busque inversión extranjera, señaló Gabriela Siller Pagaza, directora de análisis Económico Financiero en Grupo Financiero Base.

“La inversión extranjera directa alcanzaría flujos anuales entre 55 y 60 mil millones de dólares, en un plazo de 3 a 5 años, lo que ocasionaría que las exportaciones no petroleras se duplicarán en 8 años y con ello el Producto Interno Bruto del país, podría crecer a un ritmo del 3.5 ´por ciento anual, generando a su vez más empleo formal y con ello bajar la informalidad a niveles del 50 por ciento; sin embargo, para lograrlo se requiere sentar las bases para aprovechar al máximo la oportunidad del nearshoring”, explicó en plática con Grupo en Concreto.

Explicó que la Gobernanza debe generar certidumbre, mediante un estado de derecho, una baja inseguridad pública, aunado a políticas económicas internas que generen un buen ambiente de negocios; por su parte los paquetes de estímulos fiscales deben estar orientados al recibimiento del nearshoring y que en la búsqueda de inversiones extranjeras que desean relocalizar su producción, se debe dar promoción a México en el exterior como destino atractivo de inversión fija.

Recordó que el nearshoring es la relocalización de empresas, hacia un país cercano a donde desean exportar y que nuestro país se han dado cuatro épocas en donde se ha impulsado al mismo: con la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte; con el inicio de la guerra comercial entre China y Estados Unidos bajo la administración de Donald Trump; con la continuidad de la misma, además de la ratificación de los aranceles aplicados, bajo la administración de Joe Biden y con la pandemia de COVID, misma que generó un alza exponencial en costos logísticos y tiempos de entrega en el comercio internacional.

En esta coyuntura, México es un buen destino de inversión directa porque comparte frontera con Estados Unidos, brinda estabilidad en los tiempos de entrega, los costos logísticos son comparativamente bajos, adicionalmente a que el Tratado México, Estados Unidos y Canadá brinda certeza jurídica.

Con relación a los sectores con mayor potencial de crecimiento por efecto del nearshoring en México opinó que son el automotriz y de autopartes; el de equipo de computación, comunicación, medición y otros componentes electrónicos; el de enseres domésticos y el de alimentos.

“Entre los principales riesgos que enfrentan las empresas que deciden relocalizar sus plantas en México están los incrementos en costos laborales, la alta inflación, la incertidumbre en la política económica interna, la inseguridad pública, la volatilidad en el tipo de cambio, las disputas comerciales y la imposición de aranceles” sentenció Siller Pagaza.