Bancos
Pesa en mercados aumento de la inflación
Se ve lejana aún la discusión para proceder a un alza en las tasas de interés, consideran
Las economías comienzan poco a poco a salir del hundimiento registrado en 2020, a medida que avanza la inmunización y se levantan las restricciones a la movilidad, la recuperación trae de la mano sus propios riesgos.
Ante ello, la evolución de la inflación será de las principales preocupaciones económicas para los operadores e inversionistas de todo el mundo en los próximos meses y años, sin dejar de verificar la evolución del empleo y la política monetaria de los principales Bancos Centrales, como es el caso de la reserva Federal Estadounidense (FED).
Jorge Gordillo Arias, director de Análisis Económico y Bursátil y su equipo en CI Banco, señalan en su nota informativa 20 “FED abre la puerta a una posible reducción de estímulos monetarios; especulación aumentará con próxima cifra de inflación en EU y reunión del banco central en junio”, que la variable que más está pesando en los mercados en los últimos meses es el aumento de la inflación, un movimiento que se ha visto impulsado por los estímulos fiscales y monetarios y más recientemente por el repunte de precios de las materias primas. Su consecuencia directa es el repunte de las tasas de interés en el mercado de deuda de bonos soberanos.
De esta forma, señalan que la FED considera que el repunte de la inflación obedece a factores transitorios porque las actas de la última reunión muestran que los miembros del comité reconocieron en la cita de abril que la economía estadounidense creció a un ritmo más acelerado en el primer trimestre de 2021, pero aún continúa lejos de los niveles prepandemia.
En ellas, se hace notar que varios integrantes del Comité sugieren que, si la economía continúa la rápida recuperación, podrían comenzar a discutir en alguna de las próximas reuniones la fecha en que sea adecuado reducir la compra mensual de bonos, que actualmente hacen por 120 mil millones de dólares.
Por su parte, los integrantes más críticos con las medidas de la FED alegan que las políticas ultra-acomodaticias podrían sobrecalentar la economía, por lo que esta aseveración de la minuta provoca cierta reacción negativa en los activos de mayor riesgo.
Tasas de interés estáticas
Ante ello, se ve lejana aún la discusión para proceder a un alza en las tasas de interés que continúan cerca de 0.0% desde marzo de 2020, recordando que las proyecciones de la Reserva Federal publicadas a comienzos de año apuntan a final de 2023 como el momento propicio para elevar las tasas.
En este sentido, y con los riesgos de reducción gradual de estímulos, los datos de inflación de mayo de EU que se publicarán el 10 de junio y la reunión de la FED el 16 del mismo mes, serán clave para la tendencia de los precios de los activos financieros, en particular el peso mexicano.
En esta coyuntura, los analistas señalan que es probable que la tasa anual de precios al consumidor siga alta, incluso alrededor de 5.0%, aunque podría estar llegando a su punto máximo, sobre todo el rubro subyacente (excluye bienes volátiles como energéticos y alimentos).
Los especialistas recuerdan que las tasas de interés de los bonos de largo plazo del Tesoro de EU, en especial la de 10 años es el indicador financiero referente sobre sentimiento del mercado, sobre si la FED cambiará o no el estatus sobre su política monetaria antes de lo esperado.
La tasa de referencia se encamina hacia 2.5% como proceso de normalidad. En febrero y marzo, cuando subió de 1.00% al 1.60% provocó correcciones importantes en los tipos de cambio de monedas emergentes y bolsas de valores. En las últimas semanas, abril y mayo, se ha estabilizado en niveles cercanos a 1.60%, incentivando apuestas en activos financieros riesgosos, y en donde el peso mexicano se ha apreciado más de 40 centavos.
Por las razones descritas, en los próximos meses hay un riesgo considerable de que la tasa de 10 años de EU vuelva a subir provocando volatilidad y tensión en los tipos de cambio mencionados.